Viernes, 26 Julio 2019
Excusas podemos encontrar por montones para postergar el comienzo del entrenamiento, las más comunes son: la falta de tiempo, el tráfico, los deberes del hogar, las tareas de los niños, el clima, el presupuesto, poco interés en practicar ejercicios "modernos", incluso hay quienes alegan miedo escénico al mostrarse en ropa deportiva delante de desconocidos y hacer el ridículo.
Primero que nada, debe pensar que en algún momento todas esas personas comenzaron y que aunque tuvieron sus inseguridades y compromisos, no se dieron por vencidos. Después, no se esconda debajo de todas esas excusas y comience por hacer algo sencillo que luego le permita ir aumentando el ritmo progresivamente.
También puede ayudarse poniendo todo en orden y por escrito, es decir, realice un cronograma con todas las tareas que debe llevar a cabo durante la semana, visualice todo el panorama completo y escoja un momento libre que pueda regalarse. Ahora, escoja una actividad que le gustaría practicar, puede ser algo tan sencillo como caminar, pasear en bicicleta o nadar, la idea es hacer algo que no le aburra a la segunda semana de haber comenzado. Una vez que haya conseguido un poco de tono muscular puede completar sus sesiones con ejercicios de máquinas, ya sea en un gimnasio o en los Parques Biosaludables, que cuentan una variedad de equipos diseñados especialmente para tal fin.
Es importante que invierta en tiempo de calidad para sí mismo, porque todo lo que haga para mantenerse sano hoy le será recompensando con creces en el futuro, unas caminatas ahora pueden traducirse en buena circulación mañana.
